Hace algunas semanas leí el siguiente poema del Julio Trujillo
Me gustó mucho cómo suena leído en voz alta, así que lo pondré aquí. Pronto subiré más poemas de él, sin su autorización, como debe ser. Por cierto, este poema fue publicado en el diario Reforma.
Porque no puedo suscribir muerte ninguna (el fardo de la propia me conturba).
Porque hay azotes más urgentes que un tirano con armas improbables --y cercado.
Porque esa caja exhalaría, si se abriera, los gases de una fiebre: la vendetta.
Porque en el fondo del asunto hay un venero que eructa borbotones de dinero.
Porque mil justos pagarán por dos que pecan y alternan sus bravatas en escena.
Porque una guerra significa un gran fracaso: hacerla es declararse derrotado.
Porque la gente se pronuncia en una voz que truena en todo el mundo y clama no.
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